Llevamos años soñando con trabajar desde casa. Que maravilla, me ahorro el desplazamiento, mi jefe no me controla...solo veíamos ventajas.
Hemos necesitado una alarma sanitaria, COVID19, para ponernos deprisa y corriendo, a todos nosotros a tele trabajar. ¡Qué suerte!, esta opción permite mantener un mínimo de actividad laboral.
Esto que parecía tan bueno, tiene sus lados oscuros. Los recursos ofimáticos en los hogares son mucho más limitados que en las oficinas de las empresas.
Habitualmente, en la oficina los puestos están bien adaptados a las recomendaciones ergonómicas. En la oficina se dispone de:
Aun con todo esto, se recomienda realizar pausas de 10 minutos cada dos horas. Lo que suele depender según hagamos:
El teletrabajo aumenta la necesidad de realizar esas pequeñas paradas y estirar el cuerpo, pues las carencias ergonómicas generan sobrecargas musculares con menores tiempos de exposición al sedentarismo. La nueva recomendación es de realizar paradas de 5 a 10 minutos cada 50 minutos. Levantarse de la silla y caminar por casa, de la sala al pasillo, del pasillo a la cocina y volver al puesto.
Especial importancia toman los estiramientos de las zonas corporales más castigadas, la espalda, y miembros superiores. La espalda incluye lumbares y especialmente cervicales, los miembros superiores se ceban en los hombros y muñecas.
Ahora no hay escusas, nadie nos va a ver en casa realizar estos pequeños ejercicios y su beneficio es muy grande. Se propone esta tabla de ejercicios generales:
Rotación cervicodorsal :
Extensión cervico dorsal:
Ante- retroversión pélvica
Antebrazo:
Trapecio:
Para mas información: https://www.osalan.euskadi.eus/2020/buenas-practicas-en-teletrabajo-en-el-domicilio/s94-contnot/es/